Supermercados, “Minimarkets” o almacenes de esquina, se encuentran con gran parte de sus alimentos con información acerca de su composición o contenido, el motivo se debe que desde el año 2012, todos los productos alimenticios incorporaron en sus rótulos el etiquetado nutricional. La información nutricional se expresa por 100 gramos o 100 ml del producto, y por porción de consumo habitual.
El objetivo del etiquetado nutricional es entregar más herramientas a los consumidores, para que puedan seleccionar los alimentos de forma responsable e informada, haciendo uso de su derecho a la libre elección y a recibir una información veraz y oportuna sobre los productos que adquiere, caber mencionar que el etiquetado nutricional se incorporó a todos los alimentos envasados o pre envasados, incluso esta normativa se aplica a platos preparados, comercializados en porciones y todo alimento que se envase, sólo se excluyendo los productos a granel.
La Nutricionista del CESFAM Machalí, Ivania Luengo, explica en términos simples, en qué consiste el rotulado nutricional, señalando “Se entiende por rotulación al conjunto de inscripciones, o ilustraciones contenidas en la etiqueta, que informan acerca de las características de un producto, igualmente aparte del los datos de elaboración y composición del rotulado nutricional, este debe llevar la información nutricional, las que son orientaciones que nos hablan sobre el contenido de nutrientes, para que el consumidor conozca las características nutricionales de los productos que consume”.
La Profesional de Salud Machalí, también hace referencia a los mensajes nutricionales que otorga el etiquetado nutricional, expresando “Podemos inferir que el etiquetado nutricional, posee mensajes indirectos que se relacionan con los alimentos o componentes de los productos, con una condición de salud de las personas, por ejemplo: el calcio puede contribuir a fortalecer los huesos, asimismo se destaca el contenido de nutrientes, fibra dietética o colesterol de un alimento, por ejemplo “fuente de”, “sin”, “alto contenido de”, “bajo contenido de” o “contenido reducido de” calorías u otro nutriente en particular”.
“En síntesis el etiquetado nutricional contribuye a facilitar la decisión del consumidor al momento de comprar sus alimentos, teniendo presente las características nutricionales de ellos, favoreciendo la elección de los más adecuados, ya sea para mejorar o mantener su estado nutricional y/o controlar algún tipo de patología” finalizó la nutricionista, Ivania Luengo.
En nuestro país todos los alimentos contienen una etiqueta, la cual nos entrega información sobre las características generales del alimento, fechas de elaboración, vencimiento, ingredientes que componen el alimento, instrucciones para su uso, almacenamiento junto con la información nutricional.
En Chile, desde el año 1996, se incorporó al Reglamento Sanitario de los Alimentos, un articulado que regula la información nutricional que se puede colocar en las etiquetas de los productos alimenticios.