En la semana mundial de la familia, Salud Machalí por medio de la de su equipo de salud mental, concientizó a la población local sobre la importancia del rol de la familia en la salud mental y en la sociedad.
La Psicóloga del CESFAM Machalí, hizo una definición del concepto “Familia” en la salud, señalando que “La familia es el núcleo y eje central de la sociedad, el cual debe ser protegido por el estado, ya que tiene importantes tareas que guardan relación directa con la preservación de la vida humana, establecer vínculos afectivos y sanguíneos”.
Junto con lo anterior, la profesional expresó “La familia también promueve el desarrollo y bienestar físico, sicológico, social y espiritual a lo largo de las distintas etapas de la vida del ser humano, ya sea desde la función biológica; donde se promueve la reproducción de la especie, en su función educativa; donde tempranamente se encarga de sociabilizar a los niños, integrándolos en el mundo, para interactuar con adultos y pares, enseñando hábitos, sentimientos, valores, conductas, conocimientos, cultura, entre otras muchas cosas”.
Además la experta en Salud Mental agregó “Por otra parte, la familia cumple un rol solidario, ya que es aquí donde se desarrollan afectos que permiten valorar al otro, respetar, ser empático, tolerante y ayudar al prójimo, de tal manera que entre todos se pueda construir una sociedad mejor, así como también respetar y cuidar el medio ambiente, con su naturaleza y animales, con los cuales también debemos coexistir en paz y armonía. Por último, la Familia, tiene una función protectora y económica, ya que se encarga de brindar seguridad, satisfacer las necesidades básicas y cuidados a todos los integrantes del grupo familiar”.
En cuanto al rol de la familia en la Salud Mental, la psicóloga Andrea Mancinelli señaló “Cómo la familia es el lugar donde una persona crece y se desarrolla a lo largo de cada etapa de la vida y va formando su personalidad, cumple un rol fundamental, ya que depende de las formas, creencias, conductas y estilos de crianza que tengan los padres y/o familia con sus retoños, será la forma de modelar el comportamiento que tengan frente al mundo que los rodea”… “los hijos son reflejo de los padres”.
Ahora bien, es importante destacar según lo señalado por la profesional, que “lo positivo de la evolución de la especie, es que los hijos a pesar de que sus padres, familia o cuidadores hayan sido negligentes en la crianza durante la infancia, tienen la opción de aprender de los errores de la familia y tomar decisiones para no replicar lo malo y disfuncional, buscando estrategias para adaptarse mejor, promoviendo cambios positivos para ser mejores personas y adultos más responsables y maduros emocionalmente a medida que van creciendo”.
La entendida en Salud Mental, también se refirió a las posibles problemáticas psicológicas ligadas a la familia, expresando que “Existen complicaciones de la salud mental que se ven generadas al interior de la vida familiar, principalmente aquellas que derivan de situaciones de violencia intrafamiliar, maltrato infantil, crianza negligente, desapego y abusos (sexuales, consumo de drogas o alcohol); provocando trastornos emocionales, de conducta, ansiosos, depresivos, de personalidad, entre otros”.
Desde el punto de vista psicológico, la profesional de Salud Machalí, Andrea Mancinelli manifestó que el rol de la familia en un alta médica es fundamental ya que “La familia debe apoyar al integrante que está enfermo, desde el inicio, desarrollo y fin de su tratamiento médico, velando por el cumplimento de la terapia (farmacológica, sicológica, realización de exámenes), así como también acompañar afectivamente el proceso de recuperación y evolución a través del tiempo.
Consejos para una buena convivencia familiar
· Respeto: consigo mismo, con la familia y los otros para poder valorarse y ser aceptado por los demás.
· Tolerancia: ser paciente y comprensivo para vivir el día a día y aceptar las particularidades de cada miembro de la familia.
· Comunicación asertiva: efectiva, eficiente, adecuada, sin ofensas ni agresiones.
· Afecto y apego seguro: desde la gestación y principalmente los 5 primeros años de vida de la persona es fundamental el vínculo afectivo que se entrega a los niños.
· Confianza: debe existir lealtad, sinceridad y compañerismo entre los integrantes de una familia.
· Perseverancia: luchar por alcanzar las metas familiares e individuales, a pesar de la adversidad.
· Creatividad: crear estrategias para afrontar cada momento de la vida y evitar que la rutina o adversidad separe a los miembros de una familia.
Está comprobado que los pacientes que se recuperan más rápido en el proceso de terapia psicológica, son aquellos donde la familia se involucra, participa, y apoya proactivamente para alcanzar el bienestar psicológico del pariente que se encuentra afectado por un problema de salud mental.
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